Próximo Viaje: Amazonas + Norte Brasil

Holaaa!! Os escribo a puntito de coger de nuevo un avión!! Aunque vuelven a ser tres semanas de viaje esta vez me voy al calorcito!! Que ya he  tenido suficiente frío en Patagonia!! 

Salgo mañana miércoles 30 a las 3am desde Sao Paulo para Belem, desembocadura del amazonas al Norte, donde me espera un amigo francés de la uni, Damian. De ahí cogemos un barquito (o cascara de nuez como prefiráis llamarle) un par de días hasta Santarém, donde pasaremos unos días hasta coger de nuevo nuestra nuez para ir a Manaus. De allí, dejo a Damian y vuelo hasta Recife el 9 de junio para encontrarme con Marc. La idea es viajar por toda la costa hasta Fortaleza, de donde cogeré un vuelo para volver a Sao Paulo el 22 por la mañana. 

Y para los que os preguntáis que hay en el Norte de Brasil, os dejo simplemente una foto de una de las playas más impresionantes que veré (Jericoacoara):

PD: puede ser que no de senales de vida en unos días, no os preocupéis (hasta el 9). Si consigo senal de wifi juntando una liana con otra os escribo, sino os envio un mosquito tigre con mensaje.

Tiempo de Tango en Buenos Aires

Última parada -> Buenos Aires. 

Nada más llegar a Buenos Aires se nos recibió con esta imagen de postal, salida del sol sobre Río de la Plata, yo feliz mente me pensé que mejor no se podía empezar y que auguraba muy buen tiempo: error!! Fue el único sol que vimos en todo el fin de semana.

Pese a que el tiempo no acompañaba pasamos unos días increíbles!! A mi se me hizo muy corto, tengo claro que quiero volver!! En Buenos Aires lo mejor es pasear y apreciar las zonas y los edificios (y también tiendecitas monísimas y bares) que te vas encontrando. Las dos zonas que creo que tienen un encanto especial son:

Caminito en La Boca (una calle donde se ven las casas típicas y todo el mundo baila tango por la calle):

Cementerio de la Recoleta (donde están enterradas todas las personalidades importantes en unas tumbas impresionantes, de hecho si no fuera por el detalle de que no es una zona muy animada, por eso de los muertos digo, en alguna de las tumbas se podría montar un pisito bien majo, hasta de dos y tres pisos!!!):

Estas dos tumbas son las ganadoras para montarse un pisito en el Barrio, hehe!

Lo que más me gustaron fueron los mercados, hay muchos y muy variados, y sobre todo me gustó que no había las típicas cosas sino que todo era especial, además mientras paseabas habían parejas de tango por todas partes, además había estatuas y artistas como en las Ramblas de Barcelona:

Como no, aquí se venden empanadas por todas partes...

Tiempo de Tango: Eso si, a parte de todas las caminatas que nos hemos pegado por la ciudad, lo que más hemos hecho es ver y bailar Tango!! Hasta hemos tomado clases con Ian! Aquí están las fotos que lo demuestran:

En un espectáculo de Tango:

Podéis vernos en la segunda foto con la Cara de Tango que nos enseñaron a hacer

El Chalten por Ian Jester

Ian me pidió si podía escribir un post, yo dije que encantada, así no os aburrís de leerme siempre a mi! Estas son sus impresiones sobre El Chalten, al sur de Argentina. Siento las pocas fotos pero ha sido imposible cargarlas. 

Hola a todos! ¿Se nota el accento extraño ya? Soy Ian, encargado de la envidiable tarea de pasar casi cada momento de mi vida estas últimas semanas con la hermosa Marta, quien generosamenta me dejó esta oportunidad para hablar, entonces... ¡Voy a aprovecharla! Podéis estar seguros de que mi perspectiva no tiene prejuicios de ella, porque se desarolla en forma de palabras quando viajamos en colectivo (para los espanholes: bus), mientras la madrileña hibernando a mi lado me deja muchas horas para pensar. 

Bueno, seguimos con la aventura... Con nuestras mentes grabadas con el reflejo azulino del rostro enorme de Perito Moreno, embarcamos en el último colectivo para El Chaltén, un pueblito neblinoso marcando la frontera para explorar la tierra aún más salvaje de Patagonia. Mientras conduciendo en la oscuridad total, una brisa fresquita entraba a hurtadillas, advertiendo que la víspera de invierno nos rastreaba desde un punto más cercano. Una ráfaga alucinante de estrellas arriba proveía el único confort mientras caminamos deprisa en busca de nuestro albergue. Aún más lejos del sol brasileño, nos reímos a la ironia de nuestro itinerario, llenando lo vacío con la vitalidad de la que El Chaltén regularmente disfruta fuera de temporada baja.


Nuestro destino matutino era la base del rostro rojizo del monte Fitz-Roy, la dificultad del cual deja a muy pocos escaladores subir a la cumbre por año, a pesar de una altitud que alcanza solo la mitad del Himalaya. El sendero cargado de piedracitas enrosca campos de hayas rojizas, cruzando los arroyos y las colinas desenfrenadamente hasta que los miradores impresionantes justificaran su trayecto. Llegamos a la base en menos de tres horas, durante las cuales Marta esquivó con gracia la mayoría de las escarpadas piedras y agarró su premio en la forma de un bocadillo de jamón y queso. Su compañero, sin embargo, se enfrentó a un nuevo desafío -- una caminata inclinada hacia el cima de Lago Los Tres, situado en algún lugar debajo la manta de nieve la cual ya cubrió una vez la mirada clara de Fitz-Roy al amanecer. Viente minutos de escaleras me trajo a tierra helada, mientras el viento más fuerte fracasó en perforar la confianza inquebrantable de tres alpinistas delante de mi. Seguí adelante, solo para quedar con mis nuevos compañeros en un campo helado que nos acaricia como en el interior de un globo de nieve sacudido sin cesar. Sin un lago a vista y la visibilidad disminuyendo, la suerte nos llevó a través de la última cresta a un lago acurrucándose entre un anillo de montes coronados de nieve más blanca que luz sagrada. La satisfacción se multiplicaba por nuestras sonrisas mientras sacamos unos recuerdos y cambiamos el curso para el hogar, donde Marta ya estaba preparando una cena fantástica de calabacines, camiotes y macarrones. 

El dìa siguiente fuimos al Lago Torre, desde el que se puede ver un glaciar quebrándose en pedazos de hielo flotando como si te invitan a jugar al juego de las tejas (aquel que se dibujaba en el suelo y tenías que ir dando saltos). Caminamos separadamente a la vuelta a El Chaltén, lo que me hizo pensar mucho en los años de infancia, agarrando inspiración desde los aspectos de la naturaleza más olvidables para mayores. Fue como si la soledad exagera la persona que somos dentro.

Glaciar Perito Moreno

Lo primero que tengo que decir es: ¡¡¡QUÉ FRÍO!!! Hacia tiempo que no pasaba tanto frio, claro que estando en Brasil la verdad es que es dificil... Jeje!

Pero bueno, después de superar el primer shock por las temperaturas y ponerme toda la ropa posible y disponible, mi siguiente reacción es: ¡¡¡WOOOUUUU!!!

El Glaciar es impresionante! Un espectáculo! Aunque el tiempo no acompañaba mucho pudimos disfrutar de esta maravilla, primero desde las pasarelas en tierra y después desde un barquito en el lago. Creo que en este caso lo mejor es que no os diga nada más y disfrutéis vosotros mismos con las fotografías (solo digo que en directo impresiona aun más):

Y nosotros pelados de frío en la cubierta del barco:

Bariloche y la Región de los Lagos

Después de 20 horas en un bus llegamos a Bariloche, un pequeño pueblo más o menos situado en la mitad de Argentina, y que es considerado como la Suiza Argentina, es como estar en los Alpes con todas esas casitas de montaña. Además de por el chocolate, que es típico aquí...

El pueblecito no tiene mucho, solo casitas, tiendas monisimas (y carisimas) y hoteles con nombre de estaciones de sky famosas (Chamonix, Aspen...). Os dejo algunas fotos:

Esta foto se la dedico a Martita, y si no entiende porque se lo puede preguntar a Clara que seguro que lo sabe.

Como no, poniéndonos las botas con chocolate con churros, aunque a la Argentina, es decir, con chocolate tipo colacao en taza enana y churros rellenos de dulce de leche:

Y alguna fotito de la impresionante puesta de sol que se ve desde el lago del pueblo:

Pero lo mejor de Bariloche son sus alrededores. Nosotros hicimos la ruta de los siete lagos hasta San Martín de los Andes. Lo que más me impresionó fue los colores de los árboles, tenían mil tonalidades diferentes de naranjas y rojos:

Cordoba, San Juan y Valle de la Luna

Después de Montevideo ya empezamos propiamente la aventurilla por Argentina, la siguiente parada fue Cordoba, una ciudad llena de estudiantes, con muchisima vida nocturna. Nosotros aprovechamos para pasear, comer e ir al teatro, vimos una obra de improvisacion muy divertida, como no, nos toco que nos preguntaran a nosotros… No os podeis imaginar las risas…

De ahí fuimos a San Juan dos dias, el primero lo pasamos con Amil y Julieta, a los que conocimos por Couch Surfing, son una pareja encantadora que se portaron super bien con nosotros. Comimos en su casa fenomenal y depues Amil nos llevo a dar una vuelta, por los viñedos y el cerro con unas vistas preciosas:

Por la noche alquilamos un coche y nos pegamos la matada de conducir hasta el Valle de la Luna (bueno mas bien condujo Ian mientras yo dormia como un mandril). Aunque fue cansado las vistas de la mañana siguiente merecieron muchisimo la pena! Aquí queda la muestra:

NEXT STOP: Bariloche y la Region de los lagos